La importancia de tener cantera

Por Carolina Méndez

Valdebebas o La Masía son sólo dos ejemplos de ciudades deportivas donde se forma la cantera de los grandes equipos del fútbol español. Lugares donde miles de niños y jóvenes comienzan a dar sus primeros pasos profesionales con un cuero entre los pies.

Fútbol base

La formación en canteras o pequeños equipos se denomina fútbol base o fútbol formativo. En España, esta etapa termina cuando los jugadores cumplen diecinueve años, aunque en el caso de las canteras de equipos de Primera División, algunos debutan en la primera plantilla antes de llegar a esa edad. Las categorías de estos equipos van en función de los años de los jugadores, los de España se muestran en este cuadro:

Competiciones

Al igual que los primeros equipos y las selecciones absolutas, todos estos clubes participan en diferentes competiciones. Por un lado, los equipos se enfrentan en torneos como la Copa Coca-Cola (sub-15) o el Torneo Nacional Alevín Fútbol 7 (sub-13). Algunos clubes, además de estar federados y participar en competiciones nacionales, suelen ser equipos escolares y juegan sus propios torneos. Por otra parte, las selecciones de los países también compiten: a nivel europeo, en el Campeonato Europeo Sub-17 o el Sub-19, y a nivel internacional, en la Copa Mundial de Fútbol Sub-17 o la Sub-20.

Canteranos en Primera División

Volviendo a los dos equipos que mayor número de jugadores canteranos aportan a la competición de oro del fútbol español, Madrid y Barça, hay que decir que no sólo preparan a jugadores para sus propios equipos, sino que muchos acaban jugando en sus rivales de Liga o, incluso, en otras ligas europeas. En 2009, en Primera División, el Real Madrid aportaba veintisiete jugadores formados en sus categorías inferiores a equipos como Osasuna o Getafe. El Barcelona, por su parte, aportó un total de doce jugadores de La Masía a otras plantillas. Otros grandes clubes de Primera también venden canteranos a equipos rivales: los datos, también de 2009, son que el Sevilla tenía a nueve jugadores repartidos en conjuntos de Primera, y Villarreal y Valencia, seis cada uno.

Importancia de la cantera

Es por este motivo, que los equipos se esmeran en cuidar sus categorías inferiores, teniendo filiales de juveniles a benjamines de los que no sólo beben las propias plantillas sino que acaban repartidos en equipos que disputan competiciones nacionales de primer nivel. Equipos canteranos, que en muchas ocasiones, acaban jugando a nivel nacional en Segunda División o Segunda B, como ocurre en el caso del Villarreal B, FC. Barcelona B o el Real Madrid Castilla.

Burgos Promesas 2000

En el norte de la península, concretamente en la capital burgalesa, el C.D. Burgos Promesas 2000, fundado ese año, inauguró sus nuevas instalaciones el pasado mes de abril. Este conjunto toma su nombre del que fue filial del Burgos CF. en los ochenta y luego reconvertido en primer equipo con el nombre de Real Burgos Club de Fútbol por la desaparición de la primera plantilla a causa de una crisis económica en la institución. Actualmente, ya no tiene ninguna relación oficial con el Burgos CF aunque, en el pasado, hubiera algún intento de acercamiento entre entidades para tener un vínculo más estrecho.

El club cuenta actualmente con 270 jugadores y 30 entrenadores repartidos en un total de 16 equipos: uno en Regional Aficionados, dos en Juveniles, tres en Cadetes, dos en Infantiles, cinco en Alevines, dos en Benjamines y uno en Prebenjamines. Uno de los objetivos del Burgos Promesas 2000 en la creación del club fue tener unas instalaciones propias. Esta meta se hizo realidad hace algo más de un mes, después de varios años de trabajo. Los fondos para pagar los más de dos millones de euros que costaba el proyecto salieron de instituciones públicas, de los patrocinadores del club y de los padres cuyos hijos juegan en el Burgos Promesas. “Todas ellas han hecho posible la construcción de estas instalaciones”, aseguró Pedro Luis Tamayo, vicepresidente del club, quien también dijo que “ante una situación económica difícil estamos encantados de poder presentar esta instalación a la sociedad burgalesa”.

La ciudad deportiva

Los nuevos campos se encuentran en la localidad de Castañares, a 3 kilómetros de la capital. Las instalaciones cuentan con cinco campos de hierba natural: tres de fútbol 11 y dos de fútbol 7; un edificio multiusos, con once vestuarios para equipos y árbitros, gimnasio, botiquín, sala de reuniones, oficinas, cafetería y sala de audiovisuales; almacén y un aparcamiento. Tal y como afirmó José Luis Fernández Manzanedo, presidente del club, la ciudad deportiva del Burgos Promesas pretende “servir tanto para la formación deportiva como humana” de los más jóvenes. El pasado 16 de abril de 2011, la institución organizó una jornada de puertas abiertas donde “toda la familia del C.D. Burgos Promesas está invitada a conocer la instalación”. La tarde de ese sábado se destinó para disputar el primer partido oficial, donde el Burgos Promesas jugó contra el Cuéllar, equipos ambos de la categoría de Regional Aficionados.